Aprovechar picos de venta y disponer siempre de productos para cubrir la demanda permite que las empresas obtengan mejores resultados y aumenten su rentabilidad y nivel competitivo.

El demand planning es el proceso ideal para que cualquier negocio esté preparado para satisfacer las necesidades de sus clientes en el futuro, basándose para ello en datos históricos, la situación del mercado y las estrategias de sus principales competidores.

Qué es el demand planning

Un plan de demanda o demand planning es un proceso que analiza y pronostica la cantidad de productos o servicios que los clientes de una empresa comprarán en el futuro, bien sea en un periodo determinado de tiempo, o en una fecha señalada (como Black Friday o Navidades, por ejemplo).

Esta actividad es clave para garantizar que una empresa pueda satisfacer la demanda de sus productos o servicios de manera satisfactoria, evitando que se produzcan situaciones delicadas para el negocio como la temida rotura de stock (la empresa no tiene mercancías para cubrir los pedidos que recibe y, por lo tanto, deja de realizar ventas).

El demand planning implica recopilar datos históricos de ventas, tendencias del mercado, comportamiento del consumidor, factores estacionales y otros aspectos relevantes para prever con precisión cuál será la demanda futura. 

Por qué es importante para una buena gestión de almacén

En un buen plan de demanda, la gestión del stock juega un papel fundamental, pues se trata de una actividad que realiza tareas tan relevantes como la recepción de mercancías, la preparación de pedidos, la rotación de stock, el control de inventario o la realización de pedidos a proveedores.

Con un buen demand planning se obtienen datos valiosos a la hora de gestionar de forma eficiente un almacén, como por ejemplo.

• Saber en tiempo real cuántos productos hay disponibles en stock.
• Conocer la capacidad de almacenamiento para prevenir las posibles necesidades futuras (como contratar espacio extra a nivel puntual o de forma continuada).
• Realizar los pedidos a proveedores en tiempo y forma adecuados (para garantizar un suministro continuo que permita satisfacer la demanda).
• Identificar los picos de ventas para disponer de mercancías suficientes en esos periodos.
• Adaptar la organización y distribución del almacén para poder responder a una alta demanda de productos.
• Minimizar el exceso de inventario (optimizar los recursos existentes).
• Aumentar la satisfacción de los clientes al entregarles sus productos a tiempo y en perfecto estado.

Aspectos clave del demand planning

Para lograr que un plan de demanda sea eficiente y permita que la empresa se beneficie de todas sus ventajas, hay que tener en cuenta tres aspectos fundamentales:

1. Información histórica

Los datos del pasado sobre pedidos y ventas son una información crucial para realizar una buena predicción futura. Mediante informes y cuadros de mando con métricas y KPI (métricas asociadas a objetivos concretos), se puede realizar una previsión y cálculo de cuál será la demanda futura, permitiendo así adecuar los niveles de stock óptimos en cada momento.

2. Estudio del mercado

Conocer bien cómo se mueve y evoluciona el mercado es importante para poder planificar de forma correcta la demanda. Por ejemplo, si la empresa trabaja con productos estacionales, deberá identificar cuáles son las fechas donde se producen los picos de venta, pudiendo estar así preparados para disponer del stock necesario.

3. Conocer a los principales competidores

El tercer aspecto clave en la demand planning es estudiar a los competidores, es decir, saber qué estrategia siguen los competidores directos para así poder actuar antes y situarse en una posición de fuerza y privilegio en el mercado.

Una óptima planificación de la demanda es una ventaja competitiva muy interesante que toda empresa debe valorar.

Cómo llevar a cabo la planificación de demanda en tu almacén

A continuación, mostramos una serie de recomendaciones valiosas para que puedas llevar a cabo la mejor planificación de la demanda de tu negocio.

Sacar el máximo partido a tus datos

Tu empresa cuenta con gran cantidad de datos que son valiosos para poder optimizar el plan de demanda. Construyendo un dashboard basado en esta información, podrás identificar patrones y situaciones que te ayudarán a tomar mejores decisiones para que tu almacén funcione mejor y esté siempre preparado para satisfacer la demanda de tus clientes, incluso cuando tengas periodos de ventas masivas.

Contar con espacio extra de almacenamiento

En una buena planificación de demanda se hace esencial contar con un espacio extra de almacenamiento para poder disponer de los productos que se necesitan en todo momento.

Una buena forma de contar con esta capacidad extra es contratando servicios profesionales de trasteros o minialmacenes, como los que te ofrecemos en Grupo La Nave, ya que, por un costo ajustado, podrás disponer del espacio adicional necesites en cada momento para cubrir la demanda de productos por parte de los clientes.

Fomentar la colaboración entre departamentos

Para lograr que un demand planning se diseñe y ejecute con éxito, es fundamental que colaboren todos los departamentos de la empresa, sobre todo, aquellos que tienen una relación directa con las ventas y preparación de pedidos, como marketing y publicidad, logística y transporte y contabilidad y finanzas.

Apostar por la tecnología

Sin duda, la tecnología es una gran ayuda en todo el proceso de planificar la demanda. Utilizar herramientas de analítica de datos, ERP de gestión, plataformas de business intelligence, e incluso la inteligencia artificial y el big data permitirán obtener información precisa y valiosa para identificar la demanda futura y así lograr una mejor gestión del almacén que permita satisfacerla.

Hemos hablado sobre demand planning, qué es, por qué es importante y qué aspectos se deben cuidar para garantizar que este tipo de planes mejoren el funcionamiento y la respuesta de las empresas.

No debemos olvidar que una de las claves para desarrollar un buen plan de demanda es disponer de espacio suficiente para almacenar los productos y para tener un acceso rápido y seguro.

En este sentido, los trasteros y minialmacenes son la opción ideal, pues permiten contratar espacio de almacenamiento de forma personalizada para ajustarse a las necesidades reales del negocio, minimizando así los costes relacionados.