Dónde guardar los cojines y muebles de exterior cuando acabe la temporada

Guardar cojines de exterior cuando acaba el verano puede suponer un quebradero de cabeza si no contamos con el espacio adecuado.

Además, debemos pensar en proteger nuestros muebles de jardín del invierno, sobre todo, si son de madera. Con algunos trucos y consejos, conseguirás que se mantengan a salvo de la inestabilidad climatológica.

Por qué guardar los muebles de tu jardín después del verano

Conforme nos vamos acercando al otoño, los muebles de jardín se convierten en un problema que solucionar antes de que sea demasiado tarde.

Los meses de septiembre y octubre, por ejemplo, son conocidos por sus lluvias que llegan sin avisar, cosa que no hará ningún bien a nuestro mobiliario de exterior.

Con las inclemencias meteorológicas, los cojines de los sillones y sofás de exterior pueden perder su color, hincharse por la humedad y terminar destrozados.

Además, si contamos con muebles de madera, las consecuencias serán muy similares, ya que es un material que no se lleva nada bien con los cambios de temperatura y mucho menos con el agua.

Todas estas razones de peso nos llevan a pensar que es necesario contar con un espacio adecuado donde dejarlos mientras el tiempo no acompañe para volver a disfrutar de nuestro jardín o terraza.

Ideas para guardar el mobiliario de tu jardín

Para tenerlo todo bajo control, te dejamos algunas ideas para proteger tus muebles de jardín del invierno. La próxima temporada seguirán como recién comprados.

Utiliza un almacén protegido

Si te preguntas cómo guardar los cojines del jardín, así como el resto del mobiliario, la primera idea a tener en cuenta es tener preparado un almacén protegido del exterior donde puedan permanecer seguros todo el invierno.

En caso de no tener suficiente espacio en casa, podemos usar servicios como los que te ofrecemos en Grupo La Nave. Por muy poco dinero, tus muebles estarán protegidos del clima toda la temporada.

Usa el garaje

Si tienes en casa tu propio garaje o cuentas con una cochera externa, esta también puede ser una buena idea a la hora de introducir en su interior nuestros cojines y muebles de jardín.

La clave está en que cualquiera de estos espacios esté cubierto con el objetivo de que el contenido no se pueda mojar ni terminar cargado de humedad, cosa que afectará de forma muy negativa al resultado final.

Caseta en el jardín

Puede que tengas una casa grande con un jardín aún mayor. Si es tu caso, siempre es una buena idea invertir en construir una caseta o trastero de exterior donde guardar tus muebles y textiles de cara al invierno.

Aunque te pueda parecer una solución poco económica, es rentable a largo plazo. El mobiliario de jardín es uno de los más caros, por lo que protegerlo en los meses de lluvias y frío debe ser nuestra prioridad.

Almacenaje de jardín

Existen soluciones decorativas que nos pueden ayudar, y mucho, a la hora de guardar cojines y muebles de exterior. El almacenaje de jardín, como cajas o armarios decorativos, puede ser perfecto para meter los cojines y otros textiles.

Déjalos al aire libre bien protegidos

En el caso de no contar con ninguna de las opciones anteriores, otra idea es que el mobiliario de exterior, tanto de jardín como de terraza, permanezca todo el año en el exterior.

Sin embargo, si optamos por esta opción, debemos asegurarnos de que todos los elementos queden bien protegidos de las inclemencias del tiempo a través de plásticos resistentes e impermeables.

Si puede ser, también es conveniente que siempre se encuentren situados debajo de un toldo, pértiga o techo.

Qué comprobar antes de guardar tus muebles de exterior

Aunque saber guardar los cojines y muebles del jardín es primordial para que permanezcan intactos y como nuevos durante más tiempo, incluso varios años, antes de ponernos manos a la obra también debemos tener en cuenta otros consejos.

Revisa todo el mobiliario

Conforme vaya finalizando el verano y veamos que tenemos que ir guardando los muebles que tenemos en el exterior, lo primero que debemos hacer es revisar en profundidad en qué estado se encuentran.

Un aspecto fundamental es la tapicería de los cojines. Tenemos que asegurarnos de que todo esté bien y, en caso contrario, llevar los elementos a la lavandería para guardarlos de la mejor forma posible.

Qué hacer con los muebles sin cojines

Aquellos muebles que no tengan cojines ni otros textiles también deben ser revisados. Además, tendremos que asegurarnos de limpiarlos en profundidad, retirando toda la suciedad o polvo que puedan haber cogido cuando han estado fuera.

De este modo, sufrirán menos al año siguiente. Si no lo hacemos, puede que, aunque estén guardados todo el invierno, la suciedad les termine afectando igual y parecerá que han permanecido a la intemperie durante todos los meses fríos.

La aspiradora, una buena opción

Para esos muebles sin textiles que están elaborados en madera, una gran opción es usar la aspiradora para limpiarlos sin temor a que el polvo se quede incrustado en ellos.

Podemos complementar este elemento con un cepillo suave. Gracias a este lavado de cara, nuestro mobiliario tendrá una vida útil mucho más larga que si obviamos el paso de la limpieza.

Uso de plásticos y lonas adaptadas

Sin importar si vamos a guardar nuestros muebles y cojines de exterior dentro de opciones como almacenes, garajes o casetas, donde estarán más protegidos, o vamos a dejarlos fuera, tenemos que asegurar una correcta protección.

Para ello, usaremos siempre plásticos fuertes, resistentes e impermeables, con el objetivo de que no les pueda caer lluvia ni cojan humedad en ningún lugar.

Además, también es interesante hacernos con lonas adaptadas que mantendrán todos los elementos en las mejores condiciones posibles. De nuevo, aunque suponga una inversión inicial, será una idea que merecerá la pena a largo plazo, debido a su rentabilidad.

Si te preguntas dónde guardar los cojines y muebles de exterior, ya conoces todos los consejos necesarios para que, este invierno, no tengas que preocuparte. Cuando los vuelvas a utilizar, estarán justo como los has guardado.

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